lunes, 8 de diciembre de 2014

El Punctum romano

   Si saliéramos desde Segovia, atravesando la sierra de Guadarrama por el puerto de la Fuenfría y siguiendo la calzada romana que lleva hasta Titulciam, podríamos seguir el itinerario descrito por Antonino y que pasaba por Miacum y llegaba hasta Mérida. Dentro de este trazado se ubica el actual Pinto, lugar ya habitado desde el Paleolítico y que conserva restos de época romana que permiten relacionarlo con la denominación con un asentamiento de cuyo nombre, Punctum, derivaría el actual, puesto que el "punctum" o punto de paso latino podría indicar un cruce de caminos o punto significativo.





   El encontrar el punto central geográfico de la Península Ibérica siempre ha sido un tema recurrente, ubicándolo en las cercanías de Madrid y más en concreto en la zona del cerro de los Ángeles de Getafe. Pero también la leyenda cuenta cómo los musulmanes que pasaron por estas tierras midieron este punto central, ubicándolo en el centro de Pinto, donde dicen haber enterrado un arca con los instrumentos de medición, muy cerca de donde ahora está la iglesia de Santo Domingo de Silos y camino de la plaza, por lo que el núcleo de la antigua población se sitúa en torno a este lugar. Las trazas medievales de esta iglesia fueron se levantan sobre restos visigodos, románicos, e incluso sobre una antigua mezquita.



   Los restos romanos conservados en Pinto son escasos, sin embargo su pasado medieval queda mostrado en construcciones que se levantaron en el momento en que comenzó a afianzarse la población tras la reconquista de Alfonso VI a finales del siglo XI.
Del siglo XIV es la torre de Pinto, lugar de prisión de nobles y personas destacadas, realizada con sillares de piedra blanca y con cornisa de modillones de rollo.




   La línea divisoria entre Segovia y Madrid sufrió varios cambios, estableciéndose en el siglo XIII "entre Pinto y Valdemoro" por el rey Alfonso VII.
La plaza de Pinto es el centro del urbanismo creado a partir del siglo XV, donde una población consolidada se articula radialmente alrededor de este espacio donde se establece el mercado o se celebran las reuniones o acontecimientos públicos de la villa.